La menta existe desde hace mucho tiempo y se considera un ingrediente natural para cientos de recetas. La menta se ha utilizado para una variedad de dolencias, como dolores de cabeza, problemas digestivos y calambres estomacales. Pero no es solo por el gusto; hay muchas más formas de usar la menta. Una de las formas más populares de usar la menta es en la cocina, especialmente en los postres. Con un poco de menta en tu receta, puedes crear una delicia refrescante que sea perfecta para cuando quieras refrescarte. En este post, compartiré contigo cómo congelar la menta y por qué es una gran adición a tu dieta.
¿Por qué congelar la menta?
Congelar la menta es una excelente manera de conservar la frescura de la menta. También es una manera fácil y divertida de añadir un poco de sabor a tus helados o bebidas frías. Simplemente añade unas ramitas de menta a un recipiente y llénalo con agua. Agregue una tapa y congele la menta hasta que esté completamente congelada. A continuación, puede retirar la menta y guardarla en un recipiente o bolsa. La menta también se puede congelar en un jarabe o gelatina líquida.
Cómo congelar la menta
La menta es un gran sabor para disfrutar durante los meses de invierno. También es un gran sabor para congelar en cubitos de hielo. Así es como puedes congelar la menta.
- Pon las hojas de menta en una bolsa de congelador y congélalas durante 2-3 horas.
- Luego, toma una cucharada de menta y escalda en una olla pequeña con agua hirviendo.
- Por último, coloca la menta sobre una toalla de papel para que se seque.
- Coloca la menta en el congelador.
Cómo usar la menta
Me gusta hacer mi propio extracto de menta para usarlo en mi bálsamo labial casero. Uso una hoja de menta entera, luego la pongo en un frasco y lo lleno con vodka. Este proceso hará que el vodka huela a menta. Me gusta poner la jarra de alcohol en el congelador durante aproximadamente una semana. Luego, dejo que se descongele y lo uso.
Conclusión
La menta es una hierba maravillosa que se puede usar de muchas maneras diferentes. Es ideal para añadir a tu café, té y batidos. También puedes usarlo para hacer caramelos, en los que luego puedes congelarlos y disfrutarlos más tarde. Hay varias maneras de congelar la menta, incluso con una licuadora. Lo principal que debe recordar es que necesitará usar una licuadora, ya que el calor matará el sabor de la menta. Es importante usar una licuadora que tenga un ajuste de velocidad baja. Esto ayudará a preservar el sabor y la textura de la menta.