Un pollo o una gallina vieja te costarán la misma cantidad de dinero, pero la gallina vieja es mucho más útil a la hora de hacer sopa. Este proverbio nos aconseja que si algo es barato o cuesta poco, probablemente no valga mucho. Es mejor pagar un poco más por algo que será útil y durará que gastar un poco en algo que tendremos que sustituir muy pronto.
No cuentes tus pollos antes de que nazcan
Una gallina no puede poner huevos hasta los seis meses de edad. Así que no cuentes tus pollos como huevos antes de que salgan del cascarón. Esto significa que no debemos hacer planes importantes o decidir cosas hasta que estemos seguros de que van a suceder. Es mejor esperar a que algo sea seguro antes de hacer planes que dependan de ello. Este proverbio se utiliza a menudo cuando alguien hace planes o promesas que serán muy difíciles de cumplir. Otro significado de este proverbio es que no debemos hacer planes que dependan de cosas que probablemente no ocurran. No debemos contar nuestros pollos antes de que salgan del cascarón porque las gallinas no ponen huevos antes de los seis meses.
No juzgues un libro por su portada
La portada de un libro es todo lo que podemos ver, pero no nos dice nada de lo que hay dentro. Un libro suele ser la posesión más importante de una persona, por lo que no debemos juzgarlo por su portada. Este proverbio significa que no debemos sacar conclusiones sobre algo basándonos sólo en su primera impresión. Este proverbio se utiliza a menudo cuando conocemos a alguien nuevo o cuando nos encontramos con alguien por primera vez. No debemos formarnos una opinión sobre una persona basándonos en su apariencia. Es más importante averiguar cómo es realmente la persona.
No pongas todos los huevos en la misma cesta
Si pones todos los huevos en la misma cesta, no tienes más opciones. Este proverbio nos aconseja no depender de una sola cosa. Debemos tener varias opciones diferentes a las que podamos recurrir si nuestra primera opción no funciona. Este proverbio se utiliza a menudo en los negocios cuando la gente piensa invertir todo su dinero en una sola empresa. Se les advierte de que es una mala idea poner todos los huevos en la misma cesta y arriesgarse a perderlo todo si ese negocio no funciona. Este proverbio también se utiliza cuando decidimos qué cursos estudiar o qué dirección profesional elegir. Significa que no debemos concentrarnos en un solo campo o área de estudio. Debemos tener varias opciones a las que podamos recurrir si nuestra primera opción no funciona.
No pierdas el tiempo en algo que es imposible
Si algo es imposible, no es posible. Algo que es imposible nunca sucederá. Así que si pierdes tu tiempo en algo que es imposible, estás haciendo algo que nunca se terminará. Este proverbio se utiliza cuando estamos haciendo algo que nunca sucederá. Es un buen consejo para dejar de hacer algo que es imposible. Este proverbio también se utiliza cuando intentamos hacer algo que es demasiado difícil. Por ejemplo, si estamos estudiando para un examen muy difícil, es una pérdida de tiempo estudiar para algo que es imposible. También se utiliza cuando alguien intenta hacer algo que va en contra de la ley. Por ejemplo, si alguien intenta vender drogas ilegalmente, es una pérdida de tiempo porque es imposible.
La rueda que chirría se lleva la grasa
Si algo cruje o chirría, hace un ruido desagradable. Si una rueda chirría, es probable que se rompa pronto. Una rueda que no está engrasada tiene que trabajar más, por lo que pronto se romperá. Este proverbio nos aconseja hacer mucho ruido si necesitamos algo con urgencia. La rueda que más chirría se engrasa. Esto significa que lo más necesitado obtendrá lo que necesita. Este proverbio se utiliza a menudo cuando intentamos que alguien haga un trabajo. Es mejor ser la rueda que chirría porque la persona que necesita que se haga algo te verá y lo conseguirá. Este proverbio también se utiliza cuando intentamos conseguir un reembolso o algo de una empresa. Es mejor ser la rueda que chirría porque la empresa te lo conseguirá si haces suficiente ruido al respecto.
Conclusión
Estos proverbios sobre pollos, gallinas y huevos mejorarán tu vocabulario en inglés. Puedes utilizarlos en tus conversaciones diarias para describir mejor las situaciones. También puedes utilizarlos para retar a tus amigos a ver si conocen el proverbio. Aprender proverbios no es una tarea difícil. Sólo es cuestión de ser constante y de leerlos y estudiarlos con regularidad.